Y Sevilla en el recuerdo y Sevilla en el corazón y Sevilla en los labios.
En el recuerdo, porque parece que fue ayer cuando en mi niñez, cerca de ti en la distancia pero lejos en el tiempo, soñaba contigo.
Soñaba con tu sol radiante y soñaba con tu luz cegadora, y soñaba con la frescura de tus naranjos y soñaba con el olor de tus jazmines.
En el corazón, porque te sentía tan cerca de mi y era tal el amor que hacia ti despertó el que fue faro de mi vida, que tu nombre y tu imagen eran una misma cosa con mi ser.
Y en los labios... porque día a día te nombraba, bendecía una y mil veces tu nombre, y al hablar de ti se me encendía la voz y se llenaba de alegría mi alma y mi sentir.
Como dijo el gran poeta. Sevilla siempre en los labios... y así es Sevilla, siempre en los labios, y por ello y hasta en su mismo final siempre en la palabra y en el espíritu de este pregón.

Pregón de la Semana Santa de Sevilla 1988
D. Luis Rodríguez-Caso Dosal

sábado, 18 de abril de 2015

" REINAS EN CALLE FERIA "


El besamano en el mes de Noviembre de la Virgen de la Amargura, para muchos es el inicio y cuenta atrás de los días que faltan para el disfrute de la semana mejor de la ciudad, una falsa cuaresma dirían algunos, durante unos pocos días, la virgen baja de su camarin, abandona la compañía de San Juan Evangelista, y se da por entera al calor y la devoción filial de todos sus hijos.
Uno se dispone a ir a San Juan de la Palma con la certeza de que va a contemplar un año mas la visión estética jamas soñada, pero se da uno cuenta de que el montaje es casi el mismo de años anteriores, la virgen vestida de día grande, el manto de salida de Juan Manuel Rodriguez Ojeda, la Corona de la Coronación y la saya de Cayetáno Gonzalez , el Collar y Cruz Pectoral que le regalo el Cardenal Segura, todo casi igual, menos ella, ella no es igual, porque cada año la vemos con ojos nuevos, y después de contemplarla tan cerca y de depositar un beso de amor en su mano, salimos diciendo, ¡ Este año no la he visto igual!.

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